A estas alturas usted probablemente sabe que la artritis significa inflamación de las articulaciones. Si bien es cierto que existen diferentes tipos de artritis, diferentes patologías subyacentes y diferentes manifestaciones, es evidente que la inflamación es la principal culpable. La inflamación está asociada al daño de las articulaciones. La reducción de la inflamación es necesaria para que la enfermedad se gestione de manera correcta. La inflamación es la raíz de muchas enfermedades crónicas no solamente de la artritis. La inflamación desempeña un papel crucial en muchas enfermedades como el asma, ciertos tipos de cáncer y enfermedades al corazón.
Consideremos 8 formas de reducir la inflamación
Medicamentos
Muchas personas con artritis se prescriben con ciertos medicamentos para reducir la inflamación. Los fármacos antiinflamatorios del tipo no esteroideos (AINE) son unos de los más comunes prescritos para la inflamación relacionados con esta enfermedad. Estos incluyen al ibuprofeno, naproxeno, Celebrex (Celecoxib) y la Aspirina.
El acetaminofén es un fármaco de libre venta muy popular que ayuda a aliviar el dolor y bajar la fiebre pero no es un medicamento antiinflamatorio.
Otros fármacos para la artritis tales como como los FARME (fármacos antirreumáticos modificadores del curso de la enfermedad) y los corticosteroides, también ayudan a combatir la inflamación. Sin embargo, estos se dirigen a diferentes moléculas en el sistema inmune. Los riesgos y beneficios del tratamiento deben sopesarse cuando considere medicarse para reducir la inflamación.
Algunos suplementos dietéticos pueden tener efectos antiinflamatorios tales como el aceite de pescado, ya que se toma en cápsulas o en forma líquida y puede ser beneficioso para reducir la inflamación. El doctor Andrew Weil, recomienda de 2 a 3 gramos al día de un suplemento de aceite de pescado que contiene los ácidos grasos Omega 3 EPA y DHA.
El jengibre y la cúrcuma son otros suplementos que son reconocidos por tener propiedades antiinflamatorias.
Una dieta puede ayudar a controlar la inflamación
Una dieta antiinflamatoria es muy recomendable para las personas que tratan de controlar la inflamación y también para aquellos que quieren comer lo más sano posible. Una dieta antiinflamatoria se basa en la reducción de la ingesta de grasas saturadas y grasas trans mientras se aumenta la ingesta de alimentos ricos en ácido alfa-linolénico.
La dieta mediterránea se considera un buen ejemplo de dieta antiinflamatoria la cual se basa en el consumo de frutas, verduras, granos enteros, nueces, frijoles y legumbres.
El pescado y los mariscos se consumen al menos un par de veces a la semana. Las aves de corral, el queso, los huevos y el yogur, se incluyen con moderación. Los dulces y carnes rojas por lo general se tratan de evitar pero se consideran aceptables en ocasiones especiales.
En cuanto a las bebidas se cree que el té verde posee propiedades antiinflamatorias.
Mantener su peso ideal
El sobrepeso y la distribución de la grasa corporal contribuyen a desarrollar inflamaciones en las que se asocia típicamente con un exceso de inflamación.
Los investigadores reconocen que existe interacción entre la inflamación y la obesidad, aunque todavía queda mucho por investigar. Además usted debería saber cuál es índice de masa corporal (IMC) y de la misma forma cuál sería su IMC ideal.
Trabaje para mantener su peso ideal y el IMC en los niveles deseados. Si usted reduce su peso entre un 5 y 10%, esto reducirá significativamente el nivel de inflamación de acuerdo con la doctora Nadia B. Pietrzykowska en un artículo publicado en obesityaction.org.
Haga ejercicio regularmente
El ejercicio puede ser una gran manera de reducir la inflamación. Los expertos recomiendan ejercitarse entre 30 y 45 minutos con ejercicio aeróbico durante 5 días a la semana. Muchas personas con artritis se alejan del ejercicio regular y no practican ya que ellos piensan que no pueden hacer la suficiente cantidad de ejercicio para que esto tenga un impacto positivo mientras que otros sienten que el ejercicio les aumenta el dolor. Recuerde que hacer algo es mejor que no hacer nada y para esto debe comenzar lento a un ritmo en el que usted se sienta cómodo y luego seguir evolucionando.
Deje de fumar para reducir la inflamación
Los estudios han demostrado que los fumadores con artritis tienen indicadores de inflamación más altos. Si usted es actualmente un fumador el tabaco lo pone en un lugar muy incómodo.
Reducir el estrés también ayuda
Los niveles de estrés se han relacionado con la inflamación en el cuerpo. Si bien no se sabe cómo el estrés hace esto, se puede reducir el estrés mediante técnicas de relajación (yoga, meditación) lo cual puede ayudar a reducir la hinchazón.
Duerma lo suficiente
El sueño inadecuado se ha relacionado con el aumento de las inflamaciones. Al tratar de determinar la cantidad de sueño adecuado que usted debe tener, recuerde que no es exactamente lo mismo para todas las personas. De acuerdo con la Better Sleep Council, la cantidad de sueño es diferente para cada persona. Algunas personas pueden necesitar hasta 10 horas por la noche y otros necesitarán mucho menos. La persona promedio necesita entre 7 y 8 horas por noche.
Determine la cantidad de sueño que usted necesita para sentirse bien. Luego de tenga un registro de la cantidad de sueño que está tomando en forma regular y haga un patrón de sueño saludable todas las noches. Esto le ayudará a reducir cualquier inflamación.